Vinos Espumosos al Mejor Estilo Español
España posee una amplia trayectoria en la producción de vinos contando así con una gran cantidad de bodegas extendidas por toda su geografía. Uno de los vinos de mayor tradición y consumo en nuestro país son los Vinos espumosos, sobre todo durante la época navideña.
Para fabricar esta clase de vinos es necesario que el líquido pase por un segundo proceso de fermentación dentro de la botella. Esto se consigue añadiendo azúcar y embotellando el vino antes de que termine de fermentar. Aunque existen otros métodos para conseguir vino espumoso, este se considera el de mayor calidad.
¿Qué son los vinos espumosos?
Los vinos espumosos, también conocidos como vinos espumantes o de aguja, son aquellos que contienen dióxido de carbono disuelto, lo que les otorga su característica efervescencia y textura burbujeante. Esta peculiaridad se produce gracias a una segunda fermentación, que puede ocurrir dentro de la propia botella o en grandes depósitos cerrados.
Diferencias con los vinos tranquilos
A diferencia de los vinos tranquilos, donde la fermentación alcohólica se completa en depósitos abiertos o tanques, los vinos espumosos experimentan un proceso adicional de fermentación, ya sea en la botella o en tanques de gran capacidad. Durante esta segunda fermentación, se añade azúcar y levadura a la base de vino tranquilo, lo que genera la producción de dióxido de carbono, gas que queda atrapado dentro del líquido al sellar la botella o el tanque.
Métodos para la elaboración de Vinos espumosos
Existen diferentes métodos para la elaboración de los vinos espumosos. El método Champanoise o tradicional es el más reconocido y es considerada además la técnica mediante la cual se obtiene un vino de calidad superior. Sin embargo, ha quedado demostrado que algunos de los otros métodos pueden llegar también a resultados óptimos. ¿Cuáles son los métodos de elaboración de vinos espumosos? Los describimos a continuación:
Método Champanoise
Conocido comúnmente como método tradicional se refiere a la técnica en la cual el vino atraviesa un segundo proceso de fermentación dentro de la botella en que se vende.
Método trasvasado
En este método también existe una segunda fermentación del líquido dentro de la botella, sin embargo no es dentro del mismo embace en el que el vino se comercializará. En este método el vino fermenta dentro de una botella, luego pasa a un tanque donde es filtrado y por último transferido nuevamente a otra botella en la que se venderá.
Método de Granvas
Se le conoce también como método Charmat o de tanque cerrado. Es usado para la producción de vinos económicos a granel, lo cual no quiere decir que sean vinos inferiores. Aquí el vino experimenta una segunda fermentación en grandes tanques a una temperatura superior que en los métodos anteriores. Por último es filtrado y embotellado para la venta.
Método continúo ruso
Esta técnica es usada también para la producción de vinos a granel. Se parece mucho al anterior ya que también comprende un conjunto de tanques interconectados. De manera continua se agrega levadura y azúcar al primero de los tanques para que se inicie la fermentación. Una vez completada pasa a los demás para su proceso de filtrado
Gasificación
Los modernos procesos de gasificación son capaces de imitar las propiedades de los vinos obtenidos en otros procesos como los descritos anteriormente. El método de gasificación consiste en inyectar dióxido de carbono a la bebida constituyendo la forma más económica de poner burbujas al vino.
Tipos de vinos espumosos
El mundo de los vinos espumosos es amplio y diverso, ofreciendo una gran variedad de estilos y sabores para satisfacer todos los gustos. Entre los tipos más conocidos encontramos:
- Champagne: Proveniente de la región de Champagne en Francia, el champagne es considerado el rey de los vinos espumosos por su calidad, complejidad y prestigio. Se elabora principalmente con uvas Chardonnay, Pinot Noir y Pinot Meunier, siguiendo un estricto método tradicional.
- Cava: Originario de España, el cava es un vino espumoso de gran calidad que se produce en distintas regiones del país, siendo la más reconocida el Penedés. Se elabora con diversas variedades de uva, entre las que destacan Macabeo, Parellada, Xarel·lo y Chardonnay.
- Prosecco: Este vino espumoso italiano proviene de la región del Véneto y se caracteriza por su frescura y ligereza. Se elabora principalmente con la uva Glera y suele ofrecer un estilo seco o extra seco.
- Moscato: Conocido por su dulzura y aroma floral, el Moscato es un vino espumoso elaborado con la uva Moscato en distintas regiones del mundo, como Italia, Francia y Estados Unidos.
Maridaje y consumo
Los vinos espumosos son versátiles y gastronómicos, lo que los convierte en excelentes compañeros para una gran variedad de ocasiones y comidas.
- Aperitivos: Los vinos espumosos secos o brut son ideales para abrir el apetito y acompañar aperitivos ligeros, quesos frescos, mariscos y ensaladas.
- Platos principales: Los vinos espumosos rosados o de mayor cuerpo pueden acompañar platos principales como carnes blancas, pescados, risottos y pastas.
- Postres: Los vinos espumosos dulces o Moscato son perfectos para maridar postres frutales, tartas, pasteles y cremas.
Consejos para disfrutar al máximo
- Temperatura: Sirva los vinos espumosos fríos, entre 6°C y 8°C.
- Copas: Utilice copas de flauta o tulipán para concentrar las burbujas y potenciar los aromas del vino.
- Ocasión: Los vinos espumosos son ideales para celebrar momentos especiales, brindar por logros o simplemente disfrutar de un buen rato con amigos y familiares.
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