Así como lo estás leyendo, es más, seguro te has bebido unos cuantos vinos tranquilos sin saberlo, o quizá eres un experto en el tema; de cualquier manera, la buena información nunca sobra y menos sobre ese estupendo acompañante: el delicioso vino.
Por lo general asociamos el vino con adjetivos como: ligero, afrutado, intenso, pero no es muy común que lo relacionemos con la palabra tranquilo. ¿Vino tranquilo? Aunque pueda sonarte extraño, sí, existen estos tipos de vinos, son el resultado de un proceso de fabricación concreto.
Se conocen como “vinos tranquilos” a los que se obtienen de la fermentación alcohólica natural del zumo o mosto de la uva, el proceso de fermentación debe darse de forma natural como resultado de la acción de las levaduras que convierten el mosto en vino; por tanto la producción de este tipo de vinos no provoca grandes cantidades de gas carbónico.
Como tienen una poca presencia de gases carbónicos, estos vinos no tienen burbujas. Además, poseen un porcentaje de alcohol que oscila entre el 8,5% y el 14%. Un dato interesante, la mayoría de los vinos son tranquilos.
Pero antes de seguir contándote cómo se clasifican los vinos tranquilos y su proceso de fabricación, debes saber dónde puedes encontrar los mejores en España.
Por supuesto, nos referimos a Sevilla, capital de Andalucía, esa región española con gran riqueza cultural, paisajística y diversidad gastronómica; reconocida por sus zonas vinícolas.
Los vinos de Sevilla son el resultado de una tradición vinícola milenaria, por eso allí podrás satisfacer todos tus gustos en cuanto a vinos tranquilos se refiere en la gran variedad de vinotecas en Sevilla.
Comentarios (0)